Entre las carencias nutricionales específicas, la más frecuente es la ferropenia, y la dieta que se consuma puede influir de manera notable en la absorción del hierro. Es nuestro objetivo con esta revisión insistir aún más con nuestros Médicos de Familia en la importancia que tiene su labor preventiva para evitar esta manifestación; que si bien son muchos los factores que pueden llevar a la ferropenia, la dieta toma un lugar muy relevante, y se corrige solo con una buena orientación sobre los alimentos ricos en hierro y en su mejor combinación para favorecer su absorción.