La ética y el profesionalismo constituyen el fundamento de la actividad de la medicina, que es una empresa intensamente moral. El profesionalismo no es sólo la base del contrato social de la medicina, sino, principalmente, una fuerza estructuralmente estabilizadora y moralmente protectora de la sociedad. Un profesional es la persona que se ubica en una de las disciplinas eruditas y que actúa observando los estándares técnicos, éticos y deontológicos de una profesión. El concepto de profesionalismo incluye cuatro componentes fundamentales: 1) conocimiento especializado; 2) autonomía en la toma de decisiones; 3) compromiso de servicio a la sociedad; 4) autorregulación. La transformación corporativa de los sistemas de salud que ha ocurrido principalmente en Colombia y en los Estados Unidos constituye una amenaza de destrucción del profesionalismo médico. Es el fenómeno, ya declarado como una ominosa incipiente realidad, de la desprofesionalización de la medicina, que pasaría de ser una noble profesión a convertirse en un simple oficio al servicio de los intereses corporativos. Como reacción se ha conformado un movimiento médico global, el Medical Professionalism Project que pretende el fortalecimiento del profesionalismo en el nuevo milenio a través de la implementación de tres principios y diez responsabilidades profesionales fundamentales.
Medicine is an intensely moral endeavor and its practice is based on ethics and professionalism. The social contract of medicine rests on professionalism, but, furthermore, professionalism is both a stablilizing and a morally protective force in society. A professional is the person that engages in one of the learned professions and is characterized by conforming to the technical and ethical standards of a profession. The concept of professionalism incorporates four components: 1) specialized knowledge; 2) autonomy for decision-making processes; 3) commitment of service to society; 4) auto-regulation. The corporate transformation of health care services that takes place mainly in Colombia and the USA, is threatening to destroy medical professionalism. There is a widespread accepted although incipient, ominous social phenomenon: the deprofessionalization of medicine, the transformation of a noble profession into a simple trade to serve corporate interests. But there is global reaction intending to strengthen medical professionalism in the new millennium, and the Medical Professionalism Project has been launched as an international effort with a charter consisting of three principles and 10 commitments.